Un sueño largamente anhelado se hizo realidad para cinco familias de la zona rural de Granada, quienes recibieron las llaves de sus viviendas propias. Esta iniciativa, fruto de una alianza entre la empresa de Vivienda Viva, la Fundación Imusa y la administración municipal, representa un paso significativo para generar calidad de vida y fomentar el retorno al territorio.

Estas viviendas prefabricadas son el resultado de un esfuerzo conjunto, con aportes de todas las instituciones involucradas, incluyendo una inversión significativa del municipio. La construcción contó con la colaboración de funcionarios de Viva y de la administración local, y un convenio con la acción comunal para garantizar la residencia de obra, demostrando un modelo exitoso de cooperación.

Con este tipo de proyectos, el municipio busca que las familias que perdieron todo a causa de la guerra puedan regresar y continuar construyendo la historia de Granada. La priorización de familias con subsidios antiguos, que no habían podido utilizar en proyectos urbanos, es un claro ejemplo del compromiso de la administración con la equidad y la reparación social.

El alcalde anunció que en los próximos días se darán a conocer nuevos proyectos en conjunto con Viva, lo que renueva la esperanza para aquellos que aún anhelan tener su casa propia. Estas iniciativas no solo brindan un techo, sino que también impulsan la reconstrucción del tejido social y el desarrollo de las comunidades rurales en Granada.