En el municipio de La Unión, un programa innovador está transformando vidas mediante la equinoterapia, una técnica que combina la conexión con los caballos y ejercicios terapéuticos. Esta iniciativa está diseñada para favorecer el desarrollo físico y emocional de niños y niñas con discapacidad, brindando resultados positivos y esperanza a numerosas familias.

La labor de este programa se centra en atender a la población con discapacidad, ya sea cognitiva, física o psicológica, utilizando los beneficios únicos que ofrecen los caballos. Los impulsos, el calor corporal (un grado mayor al del cuerpo humano) y el paso del caballo, que es similar al del ser humano, son elementos clave que contribuyen a la mejora de los pacientes. Es el único animal que, al ser montado, permite sentir pasos idénticos a los nuestros, lo que lo convierte en una herramienta terapéutica invaluable.

Alrededor de 40 menores asisten regularmente a estas sesiones, acompañados por sus familias, terapeutas y cuidadores. En un entorno natural, se estimulan los sentidos y se fortalece el vínculo con los animales, lo que se traduce en resultados favorables. Se han observado mejoras significativas en el comportamiento, el área psicológica (especialmente en niños con hiperactividad) y en el área fisioterapéutica, con muchos pacientes que han logrado una notable recuperación de sus lesiones.

Un aspecto conmovedor del programa es que los caballos participantes han sido rescatados del maltrato y entrenados con paciencia y amor. Hoy, estos nobles animales son piezas fundamentales en un proceso de inclusión y bienestar que avanza paso a paso, al ritmo de cada galope, demostrando cómo la rehabilitación animal puede, a su vez, generar un impacto profundo y positivo en la vida de las personas.